Nuestra Historia

Hace diez años, una joven y aventurera francesa llego a este pequeño pueblo de pescadores llamado Sayulita en México, literalmente se enamoró de la cultura mexicana. Viviendo en la playa, comenzó a pensar en la toalla de playa perfecta. Se inspiró en un tejido mexicano utilizado para decorar casas, y comenzó a convertirlo en una toalla de playa. Agregó rayas de colores para darle un toque colorido y personal. También la parte del medio ambiente fue esencial para este proyecto. Por lo tanto, decidió colaborar con una empresa que proporciona algodón reciclado para hacer estas lindas toallas.
Producto orgullosamente hecho en México.